Consumo sustentable, una actitud para dejar un planeta de calidad a las nuevas generaciones

Consumo sustentable es una palabra que escuchamos a menudo en temas que  comprometen a nuestro medio ambiente, pero quizá pocos comprenden su significado.

Una de las definiciones más completas es la propuesta realizada en el Simposio de Oslo en el año 1994, que se refiere al consumo sustentable como: el uso de bienes y servicios que responden a necesidades básicas y proporcionan una mejor calidad de vida, al mismo tiempo minimizan el uso de recursos naturales, materiales tóxicos y emisiones de desperdicios y contaminantes durante todo el ciclo de vida, de tal manera que no se ponen en riesgo las necesidades de futuras generaciones.

Una visión que mira la tierra y todos sus recursos naturales como una herencia que nos ha sido dejada por nuestros antepasados con el fin de que las sociedades presentes la disfrutemos y la cuidemos para que luego la dejemos como herencia a las generaciones venideras. De modo que, este es un legado muy importante que hay que cuidar para garantizar la calidad de vida de nuestros, hijos, nietos, bisnietos, etc.

El consumo sustentable es una responsabilidad de  los consumidores, la industria y los gobiernos. Como consumidores debemos elegir qué productos y servicios no son nocivos para nuestro planeta; la industria debe seguir los criterios ambientales, y la responsabilidad de los gobiernos está enfocada en la aplicación de una normatividad que regule la degradación de nuestros recursos.

Reducir, reciclar y reutilizar son acciones que van ligadas al consumo sustentable. Acciones que tenemos que interiorizar por el beneficio de todos: humanos, animales, plantas y minerales, el planeta en su conjunto.

Cuando ponemos en práctica el consumo sustentable estamos cuidando y recuperando al planeta de los altos niveles de contaminación, el calentamiento global, lluvia acida; entre otros fenómenos que degradan nuestros ecosistemas y que  ponen en riesgo nuestra calidad de vida ocasionándonos problemas de salud, pérdida de biodiversidad o deterioro de la capa terrestre. Recimed te invita a que ahora reflexionemos qué planeta dejaremos como herencia a las generaciones que vienen y con base en ello actuemos desde ya.